Elizabeth R.Blackburn

Elizabeth Regina Blackburn

16 años| Pansexual| Bruja| Británica| Amanda Steele

Pretendemos serlo todo cuando, en realidad, no somos nada

Historia del personaje

Elizabeth nació y vivió en una de las ciudades más importantes de Inglaterra, Brístol. Vivía con su pequeña familia que se componía de sus padres y su hermano mayor. Sus padres, Thomas y Emily Blackburn, eran un matrimonio modelo que profesaba un amor incondicional hacia sus hijos. Por otra parte, Devin y Elizabeth en un principio no se llevaban muy bien, ya que once años de diferencia impedía que estos dos hermanos pudieran conocerse mejor. Sin embargo, eso no quitaba que, mutuamente, en el fondo se quisiesen. La vida de Elizabeth se podría decir que era perfecta, ¿verdad? Tenía unos padres y hermano que la querían, no tenía que preocuparse de temas económicos ya su familia gozaba de un estatus social por encima de la media, y además ella y su hermano eran especiales. El padre de familia provenía de un antiguo aquelarre de poderosos brujos de Inglaterra, por lo que los niños portaban en sus genes el don de la magia. Cuando Elizabeth se enteró al cumplir los cuatro años el mundo se le tornó como un cuento de hadas, le fascinaba la idea de poder hacer magia. No obstante, todo cuento tiene su lado oscuro y el suyo empezó cuando sus padres murieron por un accidente automovilístico cuando tenía seis años. La pequeña niña no podía concebir en su conocimiento de seis años por qué ella y su hermano no podían usar la magia para hacerlos volver. Claro está, que ella aún no sabía que toda magia tenía su límite y si se intentaba traspasarlo siempre había un precio esperando a ser pagado. Pese aún a sabiendas de eso, ella nunca le perdonó a su hermano que ni siquiera lo intentara.  

Devin, a sus prontos diecisiete, aceptó la responsabilidad de cuidar de su pequeña hermana.  Desgraciadamente los problemas de estos dos hermanos no acababan aquí. El banco y sus familiares relativos estuvieron a punto de arrebatarles por completo la herencia que les correspondía, por suerte pudieron reclamar la mitad de esta. Aunque no era la totalidad de su herencia, esta bastó para que los hermanos Blackburn pudieran continuar costeándose la vida que siempre habían llevado, además de los incesantes viajes que empezó a hacer Devin para ampliar sus conocimientos de brujería. Devin tras la muerte de sus progenitores desarrolló una creciente ambición en torno a su magia y sus potenciales. En cambio, Elizabeth tras la muerte de estos no quiso saber nada más sobre la magia por lo que dejó de practicarla. El problema es que aunque ella hiciese como si no existiera eso en ella, no significaba que iba a desaparecer, es más, a medida que crecía sus poderes se iban intensificando haciéndolos incontrolables para la joven. Como consecuencia acaba hiriendo la gente a su alrededor haciendo que ella se fuese aislando poco a poco de los demás. El único que la podía contener era su hermano, y aunque ella nunca lo admitiría, esta inmensamente agradecida de que a pesar de todo ellos pudieran permanecer junto. Sin embargo, ella estaba claramente en desacuerdo con Devin por seguir en ese mundo “inútil” de la brujería. El deseo más profundo de la joven desde que cumplió los quince era dejar de ser bruja, lo odiaba desde lo más profundo de sus entrañas. Pero lo que ella no sabía era que todo su mundo daría un giro de 180º en el momento en que se mudó junto con su hermano al curioso pueblo de Bacon Falls.

Personalidad

Elizabeth desde su más prematura edad siempre había sido una niña espontánea y divertida que le gustaba hacer el tonto con cualquiera y soltar más de una carcajada. En resumidas cuentas era como toda niña con una vida feliz.

No obstante, tras la muerte de sus padres la pequeña Elizabeth cambió completamente, volviéndose algo más fría con la gente y cerrándose en sí misma. Incluso su hermano cambió, teniendo que madurar antes, convirtiéndose en el adulto que cuidaría de la pequeña Elizabeth. Aunque nunca se lo dijo, ella siempre se sentirá en deuda con Devin por el esfuerzo que puso en recomponer su pequeña familia rota. A pesar del amor que sentía  hacía su hermano, Elizabeth podía ser bastante irritante y molesta. Sobretodo molesta, ya que su nuevo entretenimiento era molestar a la gente, y su responsable hermano era el blanco perfecto.

Y a todo esto le tenemos que sumar la maravillosa etapa adolescente, donde todos creemos saberlo todo cuando no sabemos nada. Y claramente, Elizabeth no es la excepción a la regla. Por lo que a sus dieciséis años la joven es una adolescente cínica y sarcástica, algo malhumorada y sobretodo solitaria. Pero esto último más que a la edad, se le atribuye a los problemas que tiene para controlar sus poderes, ya que esta dejó de practicar la magia, y debido a eso ha tenido numerosos incidentes que han dejado a más de un herido de gravedad a su alrededor.

Sin embargo, desde que la joven llegó a Beacon Falls ha empezado a sentir algo impensable para ella, curiosidad por la magia y todo lo que rodea a esta.

Curiosidades

• Le gustan los días lluviosos.
•Suele dar largos paseos a ninguna parte.
•Se decoloró el pelo a blanco, en realidad es morena.
•Prefiere a los gatos como mascotas por su independencia.
•Suele fumar de vez en cuando, aunque su hermano no lo sabe.